Una palabra compositiva es aquella que se forma a partir de la unión de dos o más palabras simples. Estas palabras simples se conocen como morfemas y cuando se combinan entre sí, crean una nueva palabra con un significado distinto al de las palabras originales.
Las palabras compuestas pueden ser de dos tipos: aglutinantes o fusionadas. Las palabras aglutinantes son aquellas que mantienen una separación visible entre los morfemas que la conforman. Por ejemplo, la palabra "desenmascarar" es una palabra aglutinante, ya que podemos identificar claramente que se compone de los morfemas "des-", "en-", "mascar-" y "-ar".
Por otro lado, las palabras fusionadas son aquellas en las que los morfemas se unen de tal forma que la separación entre ellos es difícil de distinguir. Un ejemplo de palabra fusionada es "corazón", que proviene de la unión del latín "cor" (corazón o corazón) y el sufijo "-azón", que significa "expresión o figura".
Las palabras compuestas pueden ser muy variadas, y se usan comúnmente en muchos idiomas, incluido el español. Algunos ejemplos de palabras compuestas en español incluyen "ratón de biblioteca" (alguien que lee mucho), "perro caliente" (un tipo de comida) y "cabeza de martillo" (alguien tonto o terco).
En resumen, una palabra compositiva es aquella que se forma a partir de la unión de dos o más morfemas, creando una nueva palabra con un significado distinto. Estas palabras pueden ser de dos tipos: aglutinantes o fusionadas, y se usan comúnmente en el idioma español y otros idiomas.